Itinerario

DÍA 1 | LONGYEARBYEN, SPITSBERGEN
Longyearbyen es la capital del archipiélago noruego de las Svalbard, situada en la isla principal de las Svalbard, y es la capital territorial más septentrional del planeta. Con temperaturas invernales que descienden a menos de 40 °C, los paisajes de esta ciudad minera son sencillamente impresionantes. Los glaciares, las montañas que se extienden hasta donde alcanza la vista y la naturaleza intacta, te hacen sentir que estás en un territorio completamente inexplorado.

DÍA 2 | STELLING FJELLET, SVALBARD & ISBUKTA, SPITSBERGEN
Al este del extremo sur del Parque Nacional de Spitsbergen, descubrirá Stellingfjellet, uno de los mayores acantilados del archipiélago de Svalbard. Este impresionante promontorio rocoso, situado al sur del glaciar Markhambreen en el macizo de Torell Land, está bordeado por aguas poco profundas, ricas en peces y nutrientes. Éstas alimentan las numerosas colonias de aves nidificantes que han encontrado refugio en las grietas de sus vertiginosas paredes. Las alturas de esta maravilla geológica son un teatro para la hábil e interminable danza de sus habitantes. Desde el mar, tendrá un mirador privilegiado para observar este grandioso decorado.
Enclavada en la punta sureste de la isla de Spitsbergen, esta pequeña bahía alberga un inmenso glaciar, el Vasil'evbreen, cuyo frente tiene más de 20 kilómetros de longitud. Se trata de una oportunidad para realizar una inolvidable salida en Zodiac®. Si las condiciones lo permiten, podrá desembarcar directamente al pie de este majestuoso glaciar, para descubrir la morrena y caminar por el primer tramo del glaciar. Dependiendo de las condiciones del hielo, quizá también tenga la suerte de acercarse a Stellingfjellet, donde se encuentra una de las mayores colonias de araos del archipiélago.

DÍA 3 | EN EL MAR
Durante su día en el mar, aproveche los numerosos servicios y actividades a bordo. Regálese un momento de relajación en el spa o manténgase en forma en el centro de fitness. Según la temporada, déjese tentar por la piscina o por un rato de sol. Este día sin escala será también una oportunidad para disfrutar de las conferencias o espectáculos propuestos a bordo, hacer compras en la boutique o conocer a los fotógrafos en su espacio dedicado. En cuanto a los amantes del mar abierto, podrán visitar la cubierta superior del barco para admirar el espectáculo de las olas y quizás tener la suerte de observar especies marinas. Un interludio verdaderamente encantado, que combina comodidad, descanso y entretenimiento.

DÍA 4 | ISLA JAN MAYEN, SVALBARD
La isla de Jan Mayen, perteneciente a Noruega, se encuentra escondida frente a las costas de Groenlandia, perdida entre el océano Ártico y el Atlántico Norte. Este pequeño trozo de tierra está habitado sólo por un puñado de meteorólogos noruegos. De su cumbre volcánica, que culmina a 2.227 metros, descienden lenguas de hielo cubiertas por un grueso manto glaciar. Estas lenguas se unen al mar, entre cordones de rocas volcánicas negras a veces teñidas de rojo. Si el cielo está despejado, tendrá la oportunidad de vislumbrar la cumbre, engalanada con una luz magnífica. La visita de un pequeño rorcual común quizás le permita completar esta imagen memorable.

DÍA 5 | EN EL MAR
Durante su día en el mar, aproveche los numerosos servicios y actividades a bordo. Regálese un momento de relajación en el spa o manténgase en forma en el centro de fitness. Según la temporada, déjese tentar por la piscina o por un rato de sol. Este día sin escala será también una oportunidad para disfrutar de las conferencias o espectáculos propuestos a bordo, hacer compras en la boutique o conocer a los fotógrafos en su espacio dedicado. En cuanto a los amantes del mar abierto, podrán visitar la cubierta superior del barco para admirar el espectáculo de las olas y quizás tener la suerte de observar especies marinas. Un interludio verdaderamente encantado, que combina comodidad, descanso y entretenimiento.

DÍA 6 | FIORDO DE WATKINS
A la entrada del fiordo de Kangerlussuaq (Groenlandia oriental), explorará uno de sus pequeños brazos laterales: el magnífico fiordo de Watkins. El enorme valle glaciar de Frederiksborg se vierte en este suntuoso desierto de roca y hielo coronado por la silueta dentada de las cumbres de la cordillera del Limón. El fiordo debe su nombre al explorador británico Gino Watkins (1907-1932), que en 1930 dirigió una expedición a bordo del Quest, el antiguo barco del célebre explorador Ernest Shackleton, con el objetivo de encontrar un punto de aprovisionamiento en esta región de la ruta aérea entre Inglaterra y Canadá. Venga a descubrir este lugar mítico en la historia de la exploración del Ártico.

DÍA 7 | TUGTILIK Y LA ISLA DE STORO
En la región de Ammassalik, la pequeña isla de Storo acogió al famoso explorador francés Paul-Emile Victor durante su primera estancia en Groenlandia en 1932. Este joven etnólogo fue depositado por el capitán Charcot en Ammassalik y luego se dirigió a la isla de Storo, donde pasó un año acogido por una familia inuit. Huesos, piedras, una tumba y algunos vestigios de chozas y cabañas de madera son la prueba de que la gente viene a la isla desde hace mucho tiempo. Su ubicación frente al estrecho de Dinamarca, a la entrada de un pequeño fiordo, es, en efecto, ideal para cazar u observar las ballenas, narvales o belugas que viven en las aguas ricas en peces del mar de Groenlandia.

DÍA 8 | FIORDO DE SERMILIK Y TASIILAQ
Quedará cautivado por el espectacular paisaje del fiordo Sermilik, el más grande del sureste de Groenlandia. Al norte, por encima de los valles glaciares, se extienden en la distancia los Alpes de Schweitzerland y sus picos que se elevan a más de 3.000 metros de altura, mientras que en el sur, donde se abre al mar de Irminger, la fuerte erosión ha esculpido el paisaje. Tres glaciares principales dan vida a una multitud de deslumbrantes témpanos que se deslizan serenamente por las aguas añiles de este majestuoso fiordo. Debe su nombre a la palabra inuit Sermilik, que generalmente se refiere a un fiordo en el que desemboca un glaciar. Fue cartografiado en 1884 por el explorador danés Gustav Holm y su tripulación, mientras invernaban en la región de Ammassalik.
En Tasiilaq, en la isla de Ammassalik, siga la estela del famoso barco del capitán Jean-Baptiste Charcot, el Pourquoi Pas ?, que partió con su tripulación en 1935 para descubrir esta pequeña isla de belleza primitiva y salvaje que permaneció inexplorada hasta finales del siglo XIX. Junto con Ittoqqortoormiit, un pueblo de 500 habitantes situado a la entrada del estrecho de Scoresby, el pueblo de Tasiilaq y sus alrededores, 800 kilómetros más al norte, son las únicas zonas habitadas de la costa oriental de Groenlandia. El nombre de esta isla hace referencia al capelán, un pequeño y llamativo pez de color plateado cuya presencia por miles anuncia a los habitantes el regreso de la primavera. Un descubrimiento sorprendente en un entorno espectacular.

DÍA 9 | QINGMINGUARTALIK Y PUERTO DE NANSEN
Bienvenido a una pequeña bahía protegida en la costa oriental de Groenlandia, a unos 200 km al sur de Tasiilaq, para una cita con la historia y el hielo. Durante esta escala, tendrá la oportunidad de visitar los restos de antiguas casas de turba de la civilización Thule. Después, tras navegar por el hielo, llegará al punto de partida de la primera travesía del casquete polar de Groenlandia, dirigida en 1888 por Fridtjof Nansen, el gran explorador polar noruego. Un lugar mágico en el que podrá subir las suaves pendientes de las primeras estribaciones del casquete polar para apreciar mejor su enorme tamaño.
Viajar al puerto de Nansen es la garantía de un viaje en el tiempo y le permitirá descubrir una magnífica bahía, en la que el casquete polar se sumerge directamente. Fue por la proximidad y accesibilidad del glaciar por lo que Fridtjof Nansen eligió este lugar para su travesía del casquete polar en agosto de 1888. Navegando a lo largo de la costa, se pueden imaginar los primeros pasos del gran explorador sobre la capa de hielo de Groenlandia.

DÍA 10 | SKJOLDUNGEN
Descubra la isla de Skjoldungen en la costa sureste de Groenlandia. Esta tierra deshabitada cuenta con magníficos paisajes que seguramente le deslumbrarán. La isla está rodeada por un impresionante fiordo, cuya característica distintiva es su doble entrada: forma un recodo antes de unirse al mar en la otra orilla. Montañas, valles glaciares, afloramientos rocosos, tundra y bosques de sauces conforman el hermoso paisaje que podrá admirar más de cerca cuando desembarque aquí. En este puerto de escala, rodeado de naturaleza salvaje y prístina, es bastante habitual ver focas barbudas, orcas, pero también aves como la collalba roja común, la collalba norteña o el cuervo común.

DÍA 11 | PRINS CHRISTIAN SUND & AUGPILATOK
Su barco se desliza silenciosamente hacia la costa de Groenlandia, en un entorno salpicado de picos puntiagudos y majestuosos glaciares... Está a punto de cruzar el Prins Christian Sund, un estrecho canal que se extiende y zigzaguea a lo largo de unos cien kilómetros entre el sureste y el suroeste de Groenlandia. Déjese hechizar por la belleza primitiva de estos paisajes únicos, que incluyen acantilados rocosos y cascadas que se alimentan de la capa de hielo y se sumergen en las aguas heladas. Aquí, a las focas barbudas les encanta tumbarse en el hielo flotante para tomar el sol.
Augpilatok, es un pequeño pueblo inuit de unos cien habitantes, cuyo nombre significa "anémona de mar" en groenlandés. Situado en una región montañosa inaccesible por carretera, sus pintorescas y coloridas casas se extienden hasta el extremo sur de Groenlandia, a orillas del espectacular Prince Christian Sound. Con unos cien kilómetros de longitud, el estrecho conecta el mar del Labrador con el mar de Irminger, y serpentea a través de impresionantes paisajes, como majestuosos glaciares, picos escarpados y acantilados rocosos con cascadas alimentadas por la capa de hielo. Esta región estaba deshabitada en el siglo XIX. El pueblo se creó en la década de 1920 y las principales actividades giran en torno a la caza, la pesca y la ganadería.

DÍA 12 | IGALIKU Y FIORDO DE NARSAQ
Desde su barco, descubra la ciudad de Narsaq. Quedará deslumbrado por la belleza de los témpanos que la rodean, grandes masas de hielo de diferentes formas y colores cambiantes. Dominada por exuberantes montañas, esta pequeña ciudad es típica de Groenlandia y está situada en el corazón de un maravilloso paisaje natural. Las fachadas multicolores de las casas y los glaciares con sus innumerables tonos de azul ofrecen un entorno mágico, propicio para el asombro.

DÍA 13 | EN EL MAR
Durante su día en el mar, aproveche los numerosos servicios y actividades a bordo. Regálese un momento de relajación en el spa o manténgase en forma en el centro de fitness. Según la temporada, déjese tentar por la piscina o por un rato de sol. Este día sin escala será también una oportunidad para disfrutar de las conferencias o espectáculos propuestos a bordo, hacer compras en la boutique o conocer a los fotógrafos en su espacio dedicado. En cuanto a los amantes del mar abierto, podrán visitar la cubierta superior del barco para admirar el espectáculo de las olas y quizás tener la suerte de observar especies marinas. Un interludio verdaderamente encantado, que combina comodidad, descanso y entretenimiento.

DÍA 14 | EVIGHEDSFJORDEN
Su barco se desliza lentamente por el agua hacia la costa occidental de Groenlandia, para entrar en Evighedsfjorden, a pocos kilómetros al sur de Kangerlussuaq. Evighedsfjorden significa "el fiordo de la Eternidad", y no es para menos: cuando se piensa que se ha llegado al final de este tramo de mar de más de 100 kilómetros de longitud, parece que no se acaba nunca, como para dar aún más placer a quienes navegan por él. El espectacular paisaje va desde los glaciares hasta la tundra con una abundante flora, pasando por los acantilados escarpados donde se han instalado numerosas especies de aves. Tómese el tiempo de observar las águilas de cola blanca y las colonias de gaviotas y gaviotines de patas negras que sobrevuelan la zona.

DÍA 15 | KANGERLUSSUAQ
De 1941 a 1992, la ciudad de Kangerlussuaq, en Groenlandia, albergó una base militar estadounidense. Hoy en día, gracias a su aeropuerto internacional, se ha convertido en un punto de tránsito para los viajeros que buscan aventuras en el Extremo Norte. Situada al norte del Círculo Polar Ártico, esta ciudad es el punto de partida de magníficos descubrimientos rodeados de naturaleza virgen. De hecho, a pocas decenas de kilómetros de allí es posible acercarse a la capa de hielo de Groenlandia, la mayor masa de hielo del hemisferio norte. Desde Kangerlussuaq, admire también los magníficos paisajes de tundra en colores otoñales, donde viven liebres árticas, bueyes almizcleros, zorros árticos, renos, halcones y águilas.

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