Itinerario

Día 1: El pueblo más grande, la isla más grande
Llegará a Longyearbyen, el centro administrativo de Spitsbergen, la isla más grande del archipiélago de Svalbard. Disfrute paseando por este antiguo pueblo minero, cuya iglesia parroquial y el Museo de Svalbard son lugares fascinantes. Aunque en los alrededores parece austero, se han registrado más de cien especies de plantas en él. Al anochecer, el barco navega hacia fuera de Isfjorden, donde es posible que pueda ver la primera ballena Minke de su viaje. Por la tarde navegará hacia Trygghamna, donde verá los restos de una estación ballenera inglesa del siglo XVII y de la estación de caza Pomor del siglo XVIII, que podrá visitar a la mañana siguiente.

Día 2: Zorros, aves marinas y renos pastoreando
Desde Trygghamna caminará hasta Alkhornet, un gran acantilado de aves marinas donde las aves buscan lugares para anidar. Debajo de los acantilados es un lugar común para ver zorros árticos, y también puede llegar a ver renos pastoreando en la exuberante vegetación si no hay mucha nieve.

Día 3: Restos de balleneros
Navegará hacia Fuglefjorden en medio de las vistas de Svitjodbreen y Birgerbukta, ambos sitios reproductivos de págalo grande y lugares probables de avistamiento de oso polar. En Birgerbukta se pueden ver hornos balleneros vascos del Siglo XVII que fueron utilizados para cocinar grasa de ballena.

El objetivo siguiente es visitar Ytre Norskøya, una pequeña isla que sirvió durante muchos años como un puesto de vigía de balleneros holandeses. Aquí todavía puedes seguir las huellas de los balleneros hasta la cima de la isla, pasando por populares acantilados de aves en el camino. En la costa hay más restos de hornos de grasa del Siglo XVII, mientras que las escúas árticas y los eiders comunes se reproducen entre las tumbas de unos doscientos balleneros holandeses.

Día 4: Glaciares y la geología de Ermaktangen
Raudfjorden, en la costa norte de Spitsbergen, es un buen lugar para contemplar glaciares. También es un lugar frecuentado por focas de anillos y barbudas, por colonias de aves marinas y ocasionalmente por osos polares y belugas. Ermaktangen, en la costa de los fiordos de Spitsbergen, es un buen lugar para contemplar el de la tierra.

Día 5: Tundra abierta
Si las condiciones lo permiten, tal vez desembarque en el lado norte de Reindyrsflya, el área de tundra más grande de Spitsbergen. Esta vasta y ondulada planicie es una zona de pastoreo popular para los renos, y varias especies de playeros también anidan aquí. Los lagos le proporcionarán un buena chance de avistar colimbo chico y eider real.

Día 6: el enorme glaciar de Mónaco
Dependiendo del clima, puede navegar hacia Liefdefjorden y navegar en frente de la cara de 5 kilómetros de largo (3.1 millas) del escarpado glaciar Mónaco. Las aguas frente a este glaciar son un lugar de alimentación favorito para miles de gaviotas tridáctilas, y la base del hielo es un popular sitio de caza de osos polares. Si las condiciones del hielo impiden navegar aquí temprano en la temporada, se puede implementar una ruta alternativa a lo largo de la costa oeste de Spitsbergen.

Día 7: Hacia los mérgulos atlánticos
Por la mañana desembarcará en Fuglesangen, donde puede observar animadas comunidades de mérgulos atlánticos. Luego navegará hacia el sur hasta Magdalenafjorden, uno de los sitios con glaciares más destacados de Spitsbergen. Una visita por la costa le mostrará los restos balleneros ingleses del siglo XVII, y también puede ver más colonias de mérgulos atlánticos.

Día 8: la comunidad más septentrional de la Tierra
Se dirigirá al norte hacia Kongsfjorden y Krossfjorden. El paisaje es probable que muestre signos de invierno, los riscos y las laderas aún cubiertas de nieve. Visitando lugares de interés histórico: Ny London, donde se pueden ver los restos de la minería de mármol de principios del siglo XX y Ny Ålesund, la comunidad más septentrional del mundo. También hay estaciones científicas y el famoso mástil ancla del dirigible Norge, que tomó el primer vuelo a través del Polo Norte hacia Nome, Alaska en 1926. Krossfjorden ofrece vistas a colosales glaciares y montañas con picos altos, sin embargo, en última instancia, la extensión de hielo en el fiordo determinará el itinerario en este lugar.

Día 9: Los días pasados de caza de oso polar
En su viaje hacia el sur, el objetivo es realizar un desembarco en Fuglehuken. Aquí puede ver los restos de la gran era de caza del oso polar. También hay grandes colonias de aves marinas y un apostadero de focas comunes. Alternativamente, podría desembarcar en la costa de Forlandsundet, en Engelskbukta o Sarstangen. En ocasiones se ven morsas aquí, y la tundra es un buen lugar para realizar una caminata.

Día 10: Amplia tundra, altas montañas
Su siguiente parada es en Bohemanflya, una amplia tundra con su propia avifauna -dependiendo de cuando llegue la primavera-, así como espectaculares formaciones geológicas a lo largo de la costa. En Gipsvika puede desembarcar cerca del acantilado de Templet, una ubicación montañosa de rocas sedimentarias erosionadas del período Carbonífero Superior, hace unos 290 millones de años.

Día 11: Ida y vuelta
Cada aventura, no importa cuán grande, eventualmente debe llegar a su fin. Desembarca en Longyearbyen, el centro administrativo de Spitsbergen, llevándose a casa recuerdos que lo acompañarán donde sea que esté su próxima aventura.

© Sebastian Arrebola

© Sebastian Arrebola

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